Defendemos la potenciación de lo público, desde un funcionamiento eficiente y eficaz como única garantía de redistribución y satisfacción real de la renta y los derechos sociales de la mayoría de la ciudadanía. La defensa de la gestión pública es la principal garantía de nuestro modelo de gobierno municipal sonde prima la Justicia Social.
Creemos
que son los ayuntamientos los que debe gestionar las políticas y servicios sociales prestados a la mayoría social, ya que son estas instituciones las más cercanas a la población. Por ello defendemos no solo el traspaso de competencias a los ayuntamientos, sino también la descentralización y la liberación de recursos económicos hacia estos por parte de las autonomías.
Desde los ayuntamientos no debemos evitar el problema por no tener competencias en muchos casos y sÍ que se deberemos invertir
gran parte del presupuesto municipal para tratar servicios y asuntos sociales.
Defendemos
unos servicios sociales que protejan a las vecinas y los vecinos, especialmente a aquellos en riesgo de exclusión social, que promuevan calidad de vida por encima de la cobertura de las necesidades básicas y que críticamente desvelen las raíces y las situaciones de desigualdad que genera este sistema social.
Defendemos que no puede existir seguridad pública si no es desde un marco democrático de ejercicio de libertades. Igualmente
entendemos que la seguridad
pública consiste en garantizar a los vecinos y vecinas, individual y colectívamente, el ejercicio de los derechos reconocidos en nuestra Constitución.
Consideramos que la administración local ha de garantizar
un envejecimiento activo y saludable: el derecho al ocio, la formación, la cultura, la práctica de actividades físicas y deportivas que hacen que las personas mayores puedan intervenir activamente en la vida económica, cultural y política.
La ciudad es el marco en el que se genera la convivencia entre las personas. Por ello apostamos por una ciudad equilibrada, planificada para la vida social, diseñada de forma participada y con criterios de sostenibilidad
social, económica y ambiental. Reclamamos un modelo de ciudades y de pueblos para la ciudadanía donde se garantice la calidad de vida, la libertad y el ejercicio de los derechos humanos desde la corresponsabilidad, recuperando espacios para un proyecto de libertad, solidaridad y responsabilidad ecológica.
Queremos contribuir, en colaboración con el conjunto de la ciudadanía a hacer urbanismo más habitable, más humano, integrador, favorecedor de la convivencia y de la inclusión social. Nuestro modelo de ciudad se construye para la gente y con la gente.
Nuestro modelo de municipio y de Justicia Social
que queremos para el entorno de convivencia que son nuestros municipios debe ser seña de identidad con la que nos ponemos al servicio y el trabajo de la gente que ellos habitan.
Las Administraciones Locales han sido una de las grandes perjudicadas por las políticas de austeridad llevadas a cabo en los últimos años, por eso, nos encontramos ante una situación de emergencia histórica en el municipalismo, y por ello es urgente e imprescindible acabar con la asfixia competencial y financiera que ha traído una realidad en la que se ha dado una merma importante en los servicios públicos prestados por los entes locales, un incremento de las privatizaciones con su consecuente aumento de costes para la administración y una reducción en las competencias municipales.
Desde Alternativa Toledo
consideramos que el ámbito local constituye un espacio fundamental para la defensa y la lucha de derechos sociales como el derecho a la sanidad, a la educación o a la vivienda y que por tanto es necesario sentar las bases del nuevo municipalismo del Siglo XXI, en el que se clarifiquen y aumenten las competencias de los Entes Locales; se garantice un nuevo sistema de financiación local que asegure derechos y la prestación de servicios esenciales; y se proteja la transparencia
y la participación directa y vinculante de la ciudadanía.
En definitiva se trata de construir ciudades con derechos, y recuperar los derechos de las personas que las habitan.